Reforma tributaria de Petro castigaría las inversiones, según analistas
Un mayor impuesto al
patrimonio y a las ganancias ocasionales, así como la reducción de descuentos
para los dividendos podría desincentivar la inversión.
La propuesta de reforma
tributaria del gobierno Petro, que se conoció ayer después de quedar radicada
en el Congreso de la República, incluye una serie de impuestos nuevos o
incrementos en las tarifas que podrían castigar las inversiones, según
analistas.
El abogado experto en
estructuración patrimonial y protección de inversiones, Mauricio Marín
Elizalde, advirtió que este proyecto de ley tendría una afectación directa a
quienes han construido patrimonio con esfuerzo, planificación y legalidad.
Particularmente, dijo que algunas propuestas amenazan con
desincentivar la planificación patrimonial y poner en jaque la estabilidad
jurídica y económica de miles de colombianos.
De hecho, la reforma
tributaria reduce la base a partir de la cual los colombianos deben empezar a
pagar impuesto al patrimonio casi a la mitad. Actualmente se cobra una tarifa
del 0,5 % a quienes tienen patrimonios superiores a 72.000 UVT (unidad de valor
tributario que calcula cada año la DIAN), es decir, $3.585 millones para este
año. El articulado pone un nuevo punto de partida de 40.000 UVT, que equivale a
$1.992 millones.
El Ministerio de Hacienda
estima que, en 2026, podría recaudar $2,2 billones mediante esta medida. Con la
modificación del umbral de entrada al pago del impuesto, se sumarían 105.332
nuevos contribuyentes a los 32.397 registrados en 2024.
Además, las familias con
patrimonios medios y altos tendrían una carga adicional significativa y
permanente, de acuerdo con el abogado especializado en tributación
internacional y wealth management, Andrés Durán, pues a partir de 70.000 UVT y
hasta los 120.000 sube la tarifa a 1 %. Entre 120.000 y 240.000 se establece en
2 %. Desde 240.000 hasta 2 millones de UVT 3 % y de ahí en adelante 5 %.
Algo similar ocurriría con
los ingresos y utilidades que tiene una persona o empresa por la venta
ocasional o esporádica de un bien, o por la ocurrencia de un hecho económico
excepcional, como ganar la lotería.
Por un lado, se fija una
tarifa del impuesto de ganancias ocasionales del 30 % para aquellos recursos
provenientes de loterías, rifas, apuestas y similares. Por otro, se ajusta la
definición, pues el bien vendido deber haber formado parte del activo fijo del
contribuyente por un término de cuatro años o más para que sea considerado una
ganancia ocasional, de lo contrario se tomará como renta líquida. Actualmente
la referencia son dos años.
El proyecto de ley
argumenta que es necesario combatir la inequidad vertical, pues estas rentas se
concentran mayoritariamente en los hogares de altos ingresos. “Estas medidas
buscan que quienes obtienen ingresos extraordinarios de alto monto contribuyan
en mayor proporción, en coherencia con su capacidad de pago”, dice.
Inversiones más caras
El proyecto de ley de
financiamiento propone eliminar el descuento del 19 % para los dividendos o
participaciones superiores a 1.090 UVT (aproximadamente $54,2 millones) en el
impuesto sobre la renta.
De aprobarse, la tarifa
para sociedades sin domicilio en el país o personas naturales sin residencia en
Colombia será del 30 % y para establecimientos permanentes en Colombia de
sociedades extranjeras también del 30 % cuando provengan de utilidades que hayan
sido distribuidas como ingreso no constitutivo de renta ni ganancia ocasional.
“Al eliminar el descuento
y ajustar las tarifas para no residentes y establecimientos permanentes, se
busca asegurar que los dividendos contribuyan de manera más equitativa al
sistema tributario, especialmente en los deciles de mayores ingresos donde se concentran
la mayoría de estos ingresos”, explicó el ministerio de Hacienda.
Sin embargo, Durán subrayó
que, con el cambio, la tributación de dividendos podría llegar al 61 %, con lo
que se convertirían en uno de los ingresos más castigados en Colombia. “Eso
significa que las personas que reciben dividendos entrarían a tributar en las
tarifas generales de renta, que van escalando hasta el 39 %, más el 20 %
adicional que tienen”, detalló.
Según el Gobierno, el
descuento previsto en el Estatuto Tributario generó una contradicción porque
ofrecía un mayor alivio absoluto a quienes percibían más dividendos, llevando a
que la tarifa efectiva sobre dividendos se redujera hasta el 0 % en rangos de
1.090 a 1.700 UVT. “Esto extendía el margen exento hasta las 1.700 UVT,
afectando el recaudo y disminuyendo la progresividad del sistema tributario”,
refiere la exposición de motivos del articulado.
Por otra parte, el
MinHacienda propuso eliminar el componente inflacionario que atenúa el efecto
de la inflación sobre los rendimientos financieros de productos como cuentas
bancarias, CDT o fondos de renta fija al momento de calcular la base gravable
del impuesto sobre la renta, que se aplica actualmente a costos financieros de
personas naturales y sucesiones ilíquidas no obligadas a llevar contabilidad
Sin embargo, la cartera
justificó su anulación diciendo que este crea un tratamiento desigual que
incentiva inversiones por ventajas fiscales y no por eficiencia económica.
Marín concluyó que estos
impuestos podrían provocar una fuga de capital, un congelamiento de inversiones
y un clima de incertidumbre jurídica sin precedentes.
Fuente: Valora
Recaudo tributario en Colombia creció 10 % a julio, pero
no alcanzó la meta del Gobierno
Es la segunda vez en el
año que los ingresos tributarios del Gobierno crecen a doble dígito, pues en
junio mostraron una variación superior al 10 %
La Dirección de Impuestos
y Aduanas Nacionales DIAN reveló que entre enero y julio de 2025 recaudó
$178,75 billones en impuestos, un 10 % más que en el mismo periodo en 2024,
cuando había acumulado $162,55 billones.
Las cifras, que se
publicaron con un retraso de más de dos semanas frente a lo que acostumbra la
entidad, dejan ver que es la segunda vez en el año que los ingresos tributarios
del Gobierno crecen a doble dígito, pues en junio también mostraron una variación
superior al 10 %.
Sin embargo, el resultado
con corte al séptimo mes del año se ubica $2,45 billones por debajo de la meta
mensual de la DIAN para julio y es inferior en $750.000 millones al cálculo
proyectado por el Comité Autónomo de la Regla Fiscal (CARF) para el mismo mes.
De esta forma, el Gobierno
lleva un avance del 58,5 % en la meta de recaudo tributario ajustada a la baja
en el Marco Fiscal de Mediano Plazo: $305,5 billones. Así, los ingresos por
esta vía ya equivalen al 14 % del Producto Interno Bruto (PIB) de este año,
partiendo de la premisa de que la economía crezca 2,7 % en todo 2025
(proyección del Banco de la República).
El resultado con corte a
julio es producto del aumento en las cuatro de las cinco categorías en que la
DIAN clasifica los impuestos, excepto en “otros”. Los mayores cambios se vieron
en los tributos de renta, que pasaron de $24,1 billones a $27,3 billones (+13,4
%), y ventas, que aumentaron desde los $36,9 billones hasta los $40,1 billones
(+8,7 %).
Solo en julio, según la
DIAN, se recaudaron $29,6 billones, un 11,3 % más que en el mismo mes en 2024,
cuando la cifra fue de $26,5 billones. Estos ingresos correspondieron en su
mayoría a retención en la renta (29,2 %) y ventas (28,5 %).
Fuente: Valora
S&P: Bancos colombianos tienen el reto de mejorar márgenes y costo del fondeo
La entrevista con María
Soledad Mosquera, líder sectorial de BRC S&P Global Ratings, forma parte de
un nuevo proyecto en alianza con Renta4 Global Fiduciaria.
Después de un periodo de crecimiento extraordinario para el sistema financiero colombiano entre 2021 y 2022, con un aumento del 18 % en los créditos, los bancos enfrentaron una coyuntura estresante los dos años siguientes y empezaron a registrar pérdidas.
Panorama del sector
financiero en Colombia
María Soledad Mosquera,
líder sectorial de BRC S&P Global Ratings en Colombia y Panamá resumió la
situación que atravesó el sector financiero en una frase: «Después de la fiesta
viene el guayabo y para la banca colombiana definitivamente esto no fue la
excepción», refiriéndose al hecho de que la expansión agresiva se dio en
productos de mayor riesgo, como las tarjetas de crédito y los préstamos de
libre inversión.
La entrevista forma parte
de un nuevo proyecto de video podcast de Valora Analitik en alianza con Renta4
Global Fiduciaria, una de las entidades más importantes del sector fiduciario
en Colombia. En ese espacio se harán entrevistas a los protagonistas del
sistema financiero y la economía de Colombia y América Latina.
¿Cómo fue la situación de
los bancos después de la pandemia?
Tras el periodo más duro
de la pandemia, la banca colombiana vivió un éxtasis entre 2021 y 2022, con un
crecimiento crediticio del 18 % impulsado por la fuerte demanda interna. Este
crecimiento fue agresivo, centrándose en productos de alto riesgo como tarjetas
de crédito y préstamos de libre inversión.
Sin embargo, esta fiesta
dio paso a un periodo de pérdidas importantes a finales de 2022, 2023 y parte
de 2024, que fue el más estresante para el sector bancario desde la crisis de
1998.
¿Cómo analizan ustedes las
pérdidas históricas de los bancos y qué información revisaron para entender qué
estaba pasando?
Las pérdidas se debieron a
una tormenta perfecta de factores. A nivel internacional, el conflicto
geopolítico generó volatilidad en los mercados, lo que encareció el costo de
financiamiento para los bancos. A nivel local, el Banco de la República aumentó
sus tasas de interés en más de 10 puntos para controlar la inflación, lo que
impactó la capacidad de pago de los deudores y el costo de financiamiento de
los bancos. La entrada en vigor del Coeficiente de Fondeo Neto Estable (CFEN)
hizo que el fondeo fuera más exigente para las entidades, aumentando la
competencia por el fondeo minorista.
Adicionalmente, el
deterioro de la calidad de la cartera y la incapacidad de algunos bancos de
hacer un reprecio en los portafolios de tasa fija agudizó la situación.
¿Cómo incide el
comportamiento de la inflación y las tasas de interés en el hecho de que los
bancos estén mostrando ganancias otra vez? ¿La perspectiva se está corrigiendo?
Aunque la perspectiva para
2025 y 2026 es más positiva, el retorno a un desempeño «normal» se espera para
finales de 2026 o 2027. El crecimiento de la economía colombiana y la expansión
del crédito bancario serán graduales, con un crecimiento nominal del crédito
proyectado en un 8 % para 2025.
Se prevé que la
rentabilidad de la banca se recupere lentamente, pero aún enfrenta retos por la
alta incertidumbre global y local. La calidad de la cartera sigue siendo un
foco de atención, ya que el indicador de cartera vencida podría mantenerse
alrededor del 4,5 %.
¿Cómo analizan que un solo
banco concentre la mayoría de las ganancias netas del sector?
La concentración de
ganancias en una sola entidad es un riesgo mayor, ya que una dependencia tan
alta disminuye la resiliencia de todo el sector. Sin embargo, esta situación es
vista como coyuntural, no estructural. Aunque una entidad acapara la mayoría de
las ganancias, el resto de los bancos aún enfrentan el desafío de mejorar su
rentabilidad. A pesar de esta concentración, la banca colombiana mantiene
buenas métricas de liquidez y solvencia.
La agencia decidió rebajar
otra vez la calificación de Colombia ¿Cuáles son las implicaciones para el
sistema financiero, el público y la economía colombiana?
Las sucesivas rebajas de
calificación han generado incertidumbre, lo que lleva a las empresas y a los
inversionistas a ser más cautelosos, limitando las decisiones de expansión.
Para los bancos, esto
implica que el costo de financiamiento no baje tan rápido como se espera y que
deben ser más cautelosos con el crédito que otorgan, orientándose a sectores de
menor riesgo. Esto podría restringir la expansión del crédito y, en consecuencia,
el crecimiento de la economía en general.
¿Cómo ven el alto déficit
fiscal del Gobierno Nacional y qué representa para los bancos y para la gente
que las tasas de interés sigan altas?
Un alto déficit fiscal
como el de Colombia impacta el costo de financiamiento de los bancos. S&P
Global Ratings proyecta que la tasa de intervención del Banco de la República
se ubicará alrededor del 8,7 % para este año, con una disminución gradual que
podría no ser sustancial hasta 2027. Si el costo de fondeo no disminuye, los
bancos tampoco podrán bajar sus tasas de interés, lo que limita el crédito para
hogares y empresas. Esto, sumado a la cautela de los deudores, podría frenar el
crecimiento de la cartera de crédito.
Fuente: Valora
Gerente BanRep: Colombia aún necesita una política monetaria restrictiva
La tendencia que tomaría
la inflación y el incremento del déficit fiscal justifican la postura del banco
central, según declaraciones de Leonardo Villar.
El gerente del Banco de la
República, Leonardo Villar, insistió en que el país debe mantener una política
monetaria restrictiva en una coyuntura donde la inflación se mantiene estancada
y el déficit fiscal aumenta.
En una entrevista con
Bloomberg, la cabeza del banco central colombiano justificó su postura
señalando que la inflación no ha disminuido al ritmo esperado y las
expectativas de precios siguen por encima del objetivo, lo que requiere una
política «un poco más restrictiva» de lo que se había proyectado ocho meses
atrás.
El último indicador del
DANE, con corte a julio, dejó ver una aceleración al 4,9 %. El dato de agosto
se conocerá este viernes y los analistas prevén un nuevo incremento que lleve
la inflación por encima del 5 %, en parte porque se trata de un mes que tiene
una base de comparación muy baja.
A esto se suma un
desbalance entre ingresos y gastos públicos, que este año llegaría al 7,1 % del
Producto Interno Bruto (PIB). Incluso, Villar recordó que tanto Moody’s Ratings
como S&P Global Ratings rebajaron la calificación crediticia de Colombia en
julio.
El gerente del banco
central explicó que la tasa de interés «neutral», que no estimula ni enfría la
economía, está aproximadamente un 2,7 % por encima de la inflación y advirtió
que un déficit amplio tiende a empujar este número hacia arriba.
«Existe un consenso
bastante amplio de que entre los riesgos más importantes para la economía
colombiana se encuentran el déficit fiscal y el aumento de la deuda que hemos
estado observando en el período reciente», dijo Villar.
El funcionario recordó que
el objetivo del BanRep es llevar la inflación al 3 % y reconoció que el Índice
de Precios al Consumidor (IPC) no ha disminuido tan rápido como se había
previsto, incluso advirtió que las expectativas se mantienen por encima del
objetivo.
El gerente insinuó que su
posición de cautela debería mantenerse al menos un año más para garantizar que
la inflación disminuya al 3 % en 2026, aunque ninguna de las proyecciones le
apunta a este resultado. La más reciente encuesta de expectativas de analistas
económicos del Banco de la República, por ejemplo, deja ver una mediana del
3,90 % para la inflación de finales del próximo año.
Villar también se refirió
a la presión del presidente Gustavo Petro para recortar las tasas de interés y
dijo que se mantendrá firme en un momento en que la independencia de los bancos
centrales es cuestionada, una situación que también se ha visto en Estados
Unidos y Brasil, haciendo referencia a las diferencias entre Jerome Powell de
la Reserva Federal y Donald Trump.
El mandatario colombiano
ha argumentado que la flexibilización de las tasas contribuiría al crecimiento
económico. En respuesta, Villar dijo que una muestra de que la política
monetaria claramente no está estrangulando al aparato productivo es que se espera
que el PIB crezca un 2,7 % este año y la demanda lo haga a una tasa anual del 4
%.
«La tasa es lo
suficientemente restrictiva como para asegurar la convergencia de la inflación
al objetivo, pero no se puede argumentar que es una tasa que impide la
recuperación económica», dijo el gerente del emisor.
Fuente: Valora
Déficit de la cuenta corriente de Colombia volvió a
incrementarse en el segundo trimestre
El déficit de la cuenta
corriente se incrementó en US$504 millones y en 0,50 puntos porcentuales (pp)
del PIB con respecto al trimestre anterior.
La balanza de pagos
Colombia registró un déficit en cuenta corriente de US$2.595 millones en el
segundo trimestre de 2025, cifra que equivale al 2,5 % del PIB trimestral,
según el informe del Banco de la República.
Así, el déficit de la
cuenta corriente se incrementó en US$504 millones y en 0,50 puntos porcentuales
(pp) del PIB con respecto al trimestre inmediatamente anterior. Vale la pena
recordar que el déficit corriente del país registra una tendencia creciente
desde el segundo trimestre de 2024.
El emisor explicó que el
resultado es producto del aumento en dólares del déficit corriente (0,48 pp),
el efecto de la depreciación del peso frente al dólar en la medición del PIB
nominal en dólares (0,01 pp) y por el efecto del decrecimiento del PIB nominal
en pesos (0,01 pp).
“Para el periodo de
análisis, la evolución de la cuenta corrientes de la balanza de pagos ocurrió
en un contexto de recuperación de la demanda interna”, destacó el banco central
en su reporte.
En detalle, el déficit
corriente se origina, a su vez, en los balances deficitarios de la balanza
comercial de bienes (US$3.624 millones) y servicios (US$132 millones). En ambos
casos, las importaciones aumentaron más que las exportaciones.
En contraste, los ingresos
netos de las transferencias corrientes (US$4.151 millones) y la disminución de
los egresos netos de la renta de factores (US$274 millones) intentaron
compensar el resultado.
Por su parte, en el mismo
periodo, la cuenta financiera registró entradas netas de capital por US$1.924
millones, equivalentes al 1,8 % del PIB trimestral. Aquí se incluye un aumento
de las reservas internacionales por US$525 millones.
Estas entradas fueron
superiores en US$310 millones y en 0,3 pp del PIB frente a lo reportado un
trimestre atrás.
La cuenta deja ver
ingresos de capital extranjero (US$6.555 millones), resultado de inversiones de
cartera e inversión extranjera directa. También se registraron salidas de
capital colombiano (US$4.555 millones), producto de inversiones financieras en
el extranjero e inversiones directas de Colombia en el exterior.
Además, se calculan pagos
de no residentes a residentes por ganancias en operaciones de derivados
financieros (US$448 millones) y un aumento de las reservas internacionales por
concepto de transacciones de balanza de pagos (US$525 millones), resultado de
los rendimientos reinvertidos.
Finalmente, en el
acumulado de enero a junio, la cuenta corriente de la balanza de pagos del país
registró un déficit de US$4.686 millones, superior en US$1.407 millones al de
un año atrás. Del mismo modo, como proporción del PIB semestral, se estima que
el déficit fue del 2,2 %, superior en 0,6 puntos porcentuales (pp) al estimado
un año antes.
A este incremento (0,6 pp)
contribuyeron el aumento en dólares del déficit corriente (0,6 pp) y el efecto
de la depreciación del peso frente al dólar en la medición del PIB nominal en
dólares (0,1 pp), compensados parcialmente por el efecto del crecimiento del
PIB nominal en pesos (0,1 pp).
Fuente: Valora
Dólar en Colombia cerró en mínimos de casi dos meses;
deuda pública se desvalorizó
La tasa de cambio se movió
a la baja a lo largo de la jornada hasta un mínimo de $4.000 justo antes del
cierre.
El dólar hoy en Colombia
terminó negociaciones con un precio de $4.002,96, lo que significa que es
inferior al último registro de ayer ($4.016,2), según datos de Set-Icap. De
hecho, este dato no se veía en un cierre desde el 14 de julio.
La tasa de cambio se movió
a la baja a lo largo de la jornada hasta un mínimo de $4.000 justo antes del
cierre. Sin embargo, en los primeros minutos había logrado un máximo de $4.047.
Los analistas habían
anticipado una tendencia alcista que finalmente no ocurrió y esperaban un
precio máximo de $4.070 que sigue sin verse desde principios de agosto.
Por su parte, el índice
DXY del dólar se mantiene en 98 puntos, luego de repuntar por encima este
valor, impulsado por ventas globales de bonos y retrocesos en las bolsas,
reflejo de crecientes preocupaciones fiscales en Reino Unido y Francia.
En otros mercados, el
precio del petróleo reporta incrementos superiores al 1 %. A la 1:00 p. m.,
hora Colombia, la referencia WTI se cotizaba en US$65,68 el barril (+2,5 %) y
el Brent en US$69,19 (+1,5 %).
En Estados Unidos, la
actividad manufacturera se contrajo en agosto, de forma que el Índice del ISM
se situó en 48,7 puntos, aunque muestra una leve mejora frente a los 48 de
julio.
En Colombia, la balanza de
pagos registró un déficit en cuenta corriente de US$2.595 millones en el
segundo trimestre de 2025, cifra que viene en aumento desde el mismo periodo en
2024, según el informe del Banco de la República. Como porcentaje del PIB, el
indicador también subió 0,50 puntos porcentuales (pp) hasta el 2,5 %.
Finalmente, la deuda
pública (TES) en Colombia cerró mercados con una desvalorización del 0,15 %,
que equivale al promedio ponderado de todas las referencias de títulos de
tesorería que integran el ETF de Global X, que se negocia en la Bolsa de
Valores de Colombia.
Esta información se toma
del indicador de Global X (GXTESCOL), que replica el índice GBI-EM de
J.P.Morgan para Colombia.
Por otra parte, los
cierres de TES de deuda pública, de acuerdo con el sistema de negociación del
Banco de la República, donde operan los grandes inversionistas de Colombia,
registró los siguientes movimientos:
•Los TES de 2026 cerraron
en 9,081 % y la jornada previa finalizaron en 8,953 %.
•Los TES de 2028
terminaron en 9,980 %, mientras que el dato anterior fue de 9,926 %.
•Los TES de 2033 cerraron
en 11,949 % y la jornada previa finalizaron en 11,810 %.
•Los TES de 2050
terminaron en 11,919 % y el dato anterior deja ver que terminaron en 11,840 %.
Fuente: Valora
Tributaria de Gobierno Petro propone fuerte aumento
impuesto al carbono para varias industrias
La reforma establece que
las empresas que certifiquen ser carbono neutrales podrán acceder a la no
causación del impuesto.
El Gobierno de Colombia, a
través del Ministerio de Hacienda y Crédito Público, radicó en el Congreso de
la República una reforma tributaria que introduce ajustes significativos al
impuesto nacional al carbono, buscando, según el Ejecutivo, fortalecer la lucha
contra el cambio climático y garantizar nuevas fuentes de financiación
ambiental y social.
La reforma establece que las empresas que certifiquen ser carbono neutrales podrán acceder a la no causación del impuesto, siempre que lo acrediten ante el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible bajo parámetros técnicos.
Sin embargo, la
compensación no podrá superar el 30 % del impuesto causado y no se permitirá
reutilizar el mismo beneficio en otro periodo fiscal.
Hay que decir que el
gravamen no aplicará al gas licuado de petróleo ni al gas natural en usos
residenciales.
Asimismo, el Ministerio de
Ambiente deberá definir los mecanismos y criterios técnicos para que los
proyectos de mitigación de gases de efecto invernadero (GEI) sean reconocidos.
Base gravable, tarifas y
gradualidad del impuesto al carbono
El artículo 222 fija una
tarifa específica de $42.609 por tonelada de carbono equivalente (CO2eq) para
2026. Entre los valores por unidad de combustible destacan:
Gas natural: $83 por metro
cúbico.
Gas licuado de petróleo:
$270 por galón.
Gasolina: $384 por galón.
Kerosene y Jet fuel: $420
por galón.
ACPM: $432 por galón.
Fuel oil: $503 por galón.
Carbón térmico: $109.285
por tonelada.
En el caso del carbón, el
impuesto tendrá una aplicación gradual: 40 % en 2026, 60 % en 2027, 80 % en
2028 y tarifa plena desde 2029.
Además, se contemplan
beneficios especiales: en departamentos como Amazonas, Vaupés, Guainía,
Putumayo y municipios del Chocó, el gravamen para gasolina, ACPM y Jet fuel
será de cero pesos.
¿Cómo estaba el impuesto
al carbono antes y cómo quedaría con la nueva tributaria?
Los valores de la tarifa
por unidad de combustible serán los siguientes:
Tributaria de Gobierno
Petro propone fuerte aumento impuesto al carbono para varias industrias
El gas natural el metro
cúbico quedaría en $83; el gas licuado de petróleo por galón en $270; la
gasolina por galón en $384; el kerosene por galón en $420; el jet fuel por
galón en $420; el ACPM (diésel) por galón en $432; el fuel oil por galón en
$503 y el carbón térmico por tonelada en $109.285.
Así está en la actualidad
el impuesto al carbono en Colombia:
Tributaria de Gobierno
Petro propone fuerte aumento impuesto al carbono para varias industrias
El gas natural el metro
cúbico está en $36; el gas licuado de petróleo por galón en $134; la gasolina
por galón en $169; el kerosene por galón en $197; el jet fuel por galón en
$202; el ACPM (diésel) por galón en $191; el fuel oil por galón en $238 y el carbón
térmico por tonelada en $52.215.
Destinación de los
recursos
El artículo 223 establece
que, a partir del 1 de enero de 2026, el 45 % de lo recaudado se destinará a
programas ambientales liderados por el Ministerio de Ambiente: restauración de
ecosistemas estratégicos, reducción de la deforestación, conservación de
fuentes hídricas y proyectos de Pago por Servicios Ambientales (PSA),
priorizando municipios PDET.
Asimismo, el 11 % se
orientará a la financiación del Programa Nacional Integral de Sustitución de
Cultivos de Uso Ilícito (PNIS), mientras que el porcentaje restante se
integrará al Presupuesto General de la Nación.
La administración de estos
recursos estará a cargo del Fondo para la Vida y la Biodiversidad, adscrito al
Ministerio de Ambiente, que manejará un patrimonio autónomo con un consejo
directivo y un director ejecutivo.
Así las cosas, la
Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) será responsable del
recaudo, la fiscalización y el cobro del impuesto, el cual se declarará y
pagará bimestralmente.
La tarifa por tonelada de
CO2eq se ajustará cada 1 de febrero con base en la inflación, sin superar tres
Unidades de Valor Tributario (UVT).
Con esta reforma, el
Gobierno de Gustavo Petro estaría buscando fortalecer la política fiscal verde,
alinearse con los compromisos internacionales de Colombia frente al cambio
climático y asegurar recursos para la transición energética y la protección de
la biodiversidad.
No obstante, algunos
expertos del sector aseguran que los cambios podrían afectar a industrias clave
para el país, que ya pagaban el impuesto al carbono.
Fuente: Valora